Domingo Faustino Sarmiento nació en la provincia de San Juan, aprendió a leer a los cuatro años, y ya a los quince, creó junto a su tío, una escuela rural en San Luis. Estando exiliado en Chile trabajó como maestro, y a su regreso a San Juan en 1836 creó la Sociedad literaria, un colegio para niñas y el diario “El Zonda”. En cuanto a su función pública fue senador, gobernador de San Juan, Ministro plenipotenciario en los Estados Unidos durante 3 años y Presidente de la Nación. Dedicó su vida a la enseñanza, investigando corrientes pedagógicas, creando escuelas públicas, bibliotecas populares en todo el pais, aumentando favorablemente la población alfabetizada. Siendo presidente, se crearon 8000 escuelas públicas, se instalaron líneas de telégrafo, y se prosiguió con el tendido de ferrocarriles. 


Según el historiador Félix Luna, Sarmiento quería un país moderno, con ferrocarriles, muchas escuelas y un futuro democrático. 

Falleció el 11 de septiembre de 1888 en la ciudad de Asunción (Paraguay) donde estaba preparando un proyecto educativo para ese país. 

Ese día fue instituido Día del Maestro, por la Conferencia Interamericana de Educación (en donde se reunieron educadores de todo el continente americano) celebrada en Panamá en el año 1943, en homenaje a Domingo Faustino Sarmiento.